La comunidad LGBTTTIQA+ es el cuarto grupo más discriminado en CDMX
En el marco del Mes contra la Discriminación que busca impulsar la eliminación de actitudes, prejuicios, estereotipos y estigmas que afectan el ejercicio de los derechos y las libertades en todos los ámbitos de la sociedad, el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED), la Fundación Arcoíris y la marca de condones Trojan, abrieron la conversación para poner atención a la situación de discriminación de la comunidad LGBTTTIQA+ en la Ciudad de México, no sólo durante el mes del orgullo sino a lo largo del año.
La discriminación es un acto a través del cual se desacredita, aisla y margina a personas y sectores de la sociedad, en este caso a las personas LGBTTTIQA+. A lo largo de los años han enfrentado esta problemática, lo cual, no sólo ha limitado sus posibilidades de desarrollo, sino que incluso ha costado la vida de cientos de personas disidentes de género u orientación sexual.
En el conversatorio “La Discriminación hacia la comunidad LGBTTTIQA+”, Pablo Álvarez Icaza, Coordinador de Políticas Públicas y Legislativas de COPRED, compartió datos de la encuesta sobre discriminación en la Ciudad de México 2021, sus distinciones e impacto en la vida de la población. Se dialogó acerca de cómo, a pesar de los distintos esfuerzos de defensores de derechos LGBTTTIQA+, activistas, e instituciones de gobierno, todavía no se ha logrado construir una cultura de derechos humanos donde las personas vivan libres de discriminación y violencia, colocando a esta población como el cuarto grupo más discriminado en la CDMX.
Si bien el trabajo de las diferentes organizaciones LGBTTTIQA+ ha logrado que la Ciudad de México sea nombrada y reconocida como una Ciudad Gay Friendly y de Libertades, los comportamientos como la discriminación, estigmas y estereotipos permanecen en la cultura de la población.
“No todas las personas tiene conocimiento y acceso a los espacios que brindan servicios y garantías a la comunidad LGBTTTIQA+ por lo que desde la CDHCM hemos buscado trabajar en los planes de acción que incidan en el derecho a la no discriminación, protocolos en materia de salud, así como capacitación permanente y constante en temas de normatividad y lenguaje incluyente”, mencionó Josefina Valencia Toledano, de la Dirección Ejecutiva de Promoción y Agenda en Derechos Humanos de la CDHCM.
El desarrollo de las personas LGBTTTIQA+ se ve afectado en distintos niveles, ya que regularmente el primer rechazo al que se enfrentan es al de sus propias familias, quienes idealmente serían la principal fuente de apoyo. Sin embargo, la cultura, los prejuicios y el desconocimiento de los derechos y libertades de ésta comunidad los hace blancos fáciles de discriminación.
La contingencia por Covid-19 incrementó la condición de vulnerabilidad que algunas personas LGBTTTIQA+ enfrentaban, al verse aislados y necesitados de espacios que reconozcan y evaluen sus condiciones de vida para emprender acciones que garanticen sus derechos y libertades en pro de un desarrollo óptimo.
Durante la mesa, se hizo un llamado a poner especial énfasis en el surgimiento de una posible pandemia como lo es la viruela símica o viruela del mono, con la cuál han nacido estigmas hacia la población LGBTTTIQA+ quienes se han presentado como uno de los principales grupos de riesgo ante esta enfermedad.
Al respecto, Alaín Pinzón, activista de la organización Vihve Libre, comentó “a pesar de que la Ciudad de México tiene ya visibilidad de los derechos de la comunidad LGBTTTIQA+ existe un problema en el desarrollo de la atención de la salud a las personas como si aún se viviera en los años 80’s. En el caso de la viruela símica existe un subregistro al que no se ha prestado atención”.
“La viruela símica está acabando con muchas de las esferas en las que la población LGBTTTIQA+ ha ganado derechos, tanto en la vida social, cultural y profesional, al no poner atención a este problema de salud a través de la prestación efectiva de servicios y la falta de vacunas, lo que se muestra claramente como un acto de discriminación”, agregó Pinzón.
Por su parte, Adriana Sánchez de Infancias Trans mencionó que “existe una deuda histórica con esta población desde que se categorizó a las condiciones disidentes de género como una enfermedad”. Asimismo, buscó reconocer el papel y la importancia de la vida de las infancias y personas transgenero, “la educación debe ir paralela a la evolución humana, no es posible que una escuela o institución cierre las puertas a un niño al desconocer y no contar con la infraestructura o capacitación para integrar a estos niños a la sociedad de forma natural. Los niños vienen con expresiones libres, libres de prejuicio, libres de temor”, puntualizó.
Para finalizar, Gloria Careaga, Directora de la Fundación Arcoíris dijo que “cualquier tipo de discriminación afecta el desarrollo del país”. Además, realizó un llamado para que la población LGBTTTIQA+ sea considerada como parte de las estadísticas nacionales que ayude a incorporar a esta comunidad a las políticas públicas, para que la sociedad, empresas e instituciones den cuentas claras a las necesidades y derechos de esta población, de acuerdo con la agenda 2030 y en pro de cumplir el lema de “No dejar a nadie atrás”.
Este conversatorio forma parte de una serie de actividades planeadas por Trojan para reforzar su compromiso como marca de informar y difundir entre sus públicos una sexualidad segura, saludable y divertida sin importar género u orientación sexual durante todo el año.