A través de la plataforma change.org, José Donit lanzó esta petición dirigida para Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación:

Fui trabajador de la empresa Coppel sucursal Puerta Aragón en Ciudad de México durante un año y tres meses nunca tuve ningún problema con nadie, hacía mi trabajo con normalidad, cumplía mis metas exigidas, y cumplía con todas las responsabilidades de mi puesto. 

Un día, en una revisión sin aviso a las pertenencias de mis compañeros y mías, el gerente de la sucursal  Adrián “N” encontró en mi mochila unas pastillas que funcionan como tratamiento y permiten tener en control el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH), haciéndolo incontagiable e indetectable. 

Al encontrar estas pastillas, Adrián “N” me cuestionó duramente sobre para qué eran esas pastillas, a lo que yo mentí diciéndole que eran para cualquier otra cosa. El gerente no quedó conforme con mi respuesta y decidió investigar por su cuenta; pasaron algunos días y me llamó a una junta con mi equipo, donde expuso y exigió que contara sobre mi diagnóstico a lo que yo me negué de inmediato y lo frené respetuosamente, diciendo que no tenía ninguna responsabilidad de contarle a nadie algo personal que no interfiere con mi actividad laboral. Él aceptó y afirmó no divulgaría nada. 

Tiempo después me enteré por mis compañeros que empezó a difundir mi diagnóstico sin mi consentimiento con todos, además de hacerme comentarios ofensivos llamándome "sidoso" y les decía que se cuidaran porque "yo era peligroso". Esto no sólo es discriminatorio, ofensivo y deshumanizado; también crea más estigma sobre el VIH. 

Decidí hablar con él y le expliqué lo que tenía que saber sobre mi enfermedad, mi tratamiento, la diferencia entre el VIH y Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA), mi indetectabilidad y los cero riesgos que corrían al convivir y trabajar conmigo. De nuevo ofreció una disculpa y dijo que dejaría de hacer todo eso, cosa que NO cumplió.

Puse la queja en Recursos Humanos (RH) y no hicieron nada. Continuó el acoso, habladurías, y ofensas por varios días más; hasta que un día en mi lugar de trabajo estaba la jefa de RH, Laura "N", mi gerente Adrián "N", el gerente general Antonio "N" y la gerente de zona Guadalupe "N"; juntos me dijeron que ya no podía trabajar ahí porque era un riesgo para todos los demás y que tenía qué firmar mi renuncia. Me negué, dije que era discriminación y me respondieron que NO podía salir del edificio hasta firmar, casí como si se tratara de una tentativa de secuestro. En ese momento dije que iba a llamar a la policía y fue así como finalmente me dejaron salir.

Me acerqué al Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación (COPRED) de la Ciudad de México y a la asociación VihveLibre, con su asesoría me apoyaron y decidí levantar una denuncia en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje y COPRED; porque mi gerente dijo que "ni me molestara en denunciar, por que ellos tenían abogados muy grandes y no procedería nada".

Además de la exposición, del maltrato, de la discriminación, de que me trataran de obligar a firmar una renuncia voluntaria, me terminan amenazando con no denunciar.

Todo ésto me desencadenó problemas de depresión y ansiedad e incluso atenté contra mi propia vida, pero hoy ya no quiero callar más y es por eso que exijo una reparación al daño, una disculpa pública para toda la población que vive con VIH y que COPPEL implemente políticas y capacitaciones de cero discriminación a sus empleados.

Basta de tanta ignorancia, crueldad y discriminación por vivir con VIH. #JusticiaParaJosé #CoppelDiscrimina

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