La diputada federal del PRI, Blanca Alcalá Ruiz recibió el Premio Nacional en la Categoría  a la Excelencia Municipalista que otorga la Federación Nacional de Municipios de México (FENAM), y la Conferencia Nacional de Municipios de México (CONAMM), por continuar impulsando el tema del municipalismo desde las distintas responsabilidades legislativas o ejecutivas que ha desempeñado, después de su gestión como presidenta municipal de Puebla Capital del 2008-2011.

Alcalá Ruiz destacó que algunas de las razones que orientaron su actuación como presidenta municipal de Puebla capital y que continúan siendo fuentes de su inspiración y compromiso en el ejercicio público son: tener presente el papel central de las y los ciudadanos como protagonistas y destinatarios de las acciones de gobierno; hacer del ejercicio de la administración pública una actividad profesional, que exige conocimiento para su planeación, estrategia en su ejecución y evaluación de sus resultados.

 Así como pasión y al mismo tiempo, el compromiso que representa conducir los destinos de ese lugar en el que crecimos, vivimos, formamos un hogar e imaginamos un futuro, que se convierten finalmente en motor de nuestro desempeño, y razón para hacer que el cumplimiento de la ley, la transparencia y la rendición de cuentas, sean los motores que nos impulsan todos los días para lograr los mejores resultados.

"Agradezco en primer término el honor con el que me distinguen este día al concederme el premio a la excelencia municipal, reconocimiento que me honra y compromete como servidora pública, como mujer y como mexicana", expresó.

La legisladora priista recordó que por tres años consecutivos como alcaldesa obtuvo el Primer lugar del Premio Hábitat, entre ellos el de Mejoramiento y revitalización del Centro Histórico patrimonio de la Humanidad que logró la reubicación de ambulantes y  la recuperación del esplendor  de la ciudad; ocupar el Primer lugar como el municipio mas transparente del país, lograrlo también en transparencia presupuestal, ser el primero  en certificarse en igualdad; o el reconocimiento como  municipio socialmente responsable, y numerosas distinciones como el municipio más activo en materia deportiva, 

"Pero quizá uno de los más significativos fue el obtener el segundo lugar en materia de seguridad publica", señaló.

  El mérito de todo ello, sostuvo, fue el trabajo diligente de servidores públicos que entendieron que la administración pública es una ciencia, que exige rigor, disciplina. Y al mismo tiempo creatividad, entrega y sobre todo participación ciudadana.

 "La única forma de hacer bien las cosas es estar informado y prepararse permanentemente.

Eso debemos hacer los gobernantes para detectar y corregir los grandes temas que se enfrentan en el día a día y que en el fondo buscan mejorar las condiciones de vida de las personas en nuestras ciudades, estados o el País que se gobierna.

 "Eso, debe ser la exigencia cotidiana de un pueblo que deposita la confianza en sus autoridades y en el que las y los gobernantes debemos responder con eficacia y eficiencia con legalidad y sensibilidad a favor de la gente". 

 Resaltó que cada día más mujeres asumen responsabilidades en las más altas esferas de toma de decisiones, sin embargo y a pesar de ello, los retos, siguen siendo, amplios y desafiantes; frente a la velocidad que imprime la tecnología, las contingencias ambientales, la desigualdad, la polarización social y también la violencia deshumanizante que mata y lastima a todas y todos, particularmente a las mujeres; situación que exige recapitular en las estrategias y profundizar en sus resultados".

 "En síntesis entender las nuevas coordenadas y actuar de manera puntual y oportuna.

 Decir basta y atrevernos a diseñar un mejor presente si queremos asegurar un futuro mejor", aseguró.

Abogó por seguir trabajando para tener los mejores gobiernos, con administraciones públicas, creativas, resilientes, eficaces e incluyentes que acaben de una vez por todas con cualquier asomo de corrupción.

 Pero también, dijo, con la violencia política en razón de género, que alcaldesas, gobernadoras, juezas o ministras se enfrentan cada día.

El premio es organizado por la CONAMM, la FENAMM y las más importantes organizaciones de municipios del país, junto a importantes instituciones académicas, organismos internacionales y redes municipalistas, con la visión de promover las iniciativas y gestiones más exitosas, innovadoras y replicables que se desarrollan en ciudades de nuestro país.